Sra. Ministra...por favor

10.07.2018

Por Luis Baras

Sra. Ministra...yo le digo "NO". Mire, soy hijo, hermano, padre, pareja, tío y abuelo de mujeres, por tanto nada sospechoso de no defenderlas a muerte, ¿sabe una cosa?... no permitiría que les rozara ni el aire, por tanto, quiero, igual que usted ministra y la más feminista de este país, leyes que las protejan. Este preámbulo solo tiene el objetivo de dejar las cosas claras. Ya es triste que yo tenga que decir y aclarar todo esto para poder expresarme en libertad y que no se me etiquete de machista, dado como marcha este país en materia de expresión políticamente correcta, Que conste que lo hago, no porque tema a los y las de siempre, lo hago para que nadie tergiverse ni trate de confundir lo que voy a opinar sobre algunos de sus comentarios. Sra. Calvo, usted ha manifestado en rueda de prensa lo siguiente:

El Gobierno quiere modificar el Código Penal: si la mujer no dice «sí», se considerará agresión sexual

Quiero entender que tras esta modificación de la ley que propone en nombre del gobierno, cuando un hombre y una mujer tengan una relación, el hombre deberá obtener, en cada encuentro, un certificado, prueba testifical, testimonio o acta notarial que ella ha consentido la relación y ha dicho un "si" previo al escarceo o relación. Entiendo también que el hombre deberá preguntarlo y ella manifestarlo fehacientemente. Ya no valdría lo implícito, ni el silencio ante la atracción, el enamoramiento, el arrebato momentáneo, el calentón o el enrollamiento o lo que sea. Le recuerdo que el flechazo, a veces, deja a la gente sin palabras. Según su titular, salvo que grabemos el momento de la respuesta de de ella o lo certifiquemos bajo documento y firma de ambos, no nos quedaría a los hombres más posibilidad que confiar y cruzar los dedos para un futuro y confiar en la palabra de nuestra pareja ya que ¿sin pruebas como demostramos que nos dijo que si? ¿Y si luego ella dice que nos dijo que si y si que nos dijo que no.?, ¿No se dan cuenta ustedes que esto es una barbaridad y que solo tiene en cuenta el testimonio de una parte?...Eso solo se puede aclarar mediante pruebas, o sea, ni más ni menos que como está legislado ahora. Por favor Sra. Ministra que usted es jurista y de nivel, por eso no la entiendo. No se cual habrá sido su experiencia en el amor porque también declaró: 

"Hay que acabar con el estereotipo del amor romántico: es machismo encubierto"

Como comprenderá, y siendo yo un hombre sensible, además de autor y poeta, no puedo estar de acuerdo con usted. Si ese es su pensamiento se está cargando la esencia misma de la relación hombre y mujer. No creo que su feminismo la lleve a pensar eso de verdad. Con ese criterio solo existiría el amor material o interesado. Bajo esa visión tan fría del amor toda la pléyade de poetas y cantautores románticos tendrían una vida y una obra sin sentido. Pobre Armando Manzanero, Alejandro Sanz, Alborán o Vanesa Martin. Pobres Becquer, Espronceda, Victor Hugo o Rosalia de Castro. "Todos condenados al olvido por machistas". Los hijos nacidos del amor se quedarían huérfanos del motor que puso en marcha la razón y la emoción de su existencia. Todo sería banal y animal. La música, el cine, el teatro, la lírica, la danza se quedarían sin argumentos y sin belleza porque todos están plagados de obras con argumentos románticos. El pensamiento y la propia humanidad necesitan del romanticismo. ¿todo esto es machismo Sra. Ministra? .¿De verdad ese es el pensamiento del Gobierno al que pertenece que está plagado de mujeres?. Pero si el amor romántico de pareja es uno de los pilares y grandes placeres de la vida. Quiero pensar que fue una frase irreflexiva y desafortunada en un momento inoportuno de su vida porque no me pega de usted. Sra. Ministra Calvo ya que me consta, y lo se, que es una mujer cualificada, seria, culta y preparada, doctora en derecho Constitucional y profesora de Universidad con mucha experiencia en docencia y en política. 

Por favor, vamos a tomarnos en serio este tema que es tan importante, tanto para las mujeres como para "los hombres", aunque a veces no lo parezca porque hay un determinado grupo de gente que se empeña en que no sea así. Sra. Calvo, con ruego que se lo traslade al resto del gabinete al que pertenece, le voy a aclarar una cosa, la mayoría de los hombres protegemos a las mujeres que nos rodean. Ni las agredimos, ni las acosamos. Afortunadamente son una minoría de hombres los que lo hacen producto de la mala educación recibida y de sus propios genes. Los hombres y las mujeres, nos conocemos, nos gustamos, flirteamos, nos insinuamos, nos enrollamos, muchas veces nos enamoramos, nos casamos y nos descasamos y lo hacemos desde las claves de seducción, del "amor romántico". Aunque a usted el romanticismo le parezca sospechoso, siento comunicarle que mucha gente, en su plena libertad de pensamiento, cree en el amor y no piensa como usted, entre otras muchas mujeres. La mayoría de los hombres tratamos a las mujeres desde el respeto, sin acosar, ni forzar a nadie. Después están lo impresentables, los bestias, los antisociales, los violentos, los malnacidos, los miserables, los amorales, los locos, los tarados, etc. 

Esta mala educación reinante es el resultado de una política en la que todos los partidos, incluyendo el suyo, han colaborado. Un mal discurso que le ha vendido a los jóvenes de muchas generaciones una gran mentira, haciéndoles creer que el estado del bienestar solo les da derecho a las libertades, a la buena vida, a muy pocas responsabilidades y casi ninguna obligación, entre otras, las de no comportarse con actitudes machistas. Los principios, la educación, la formación, la cultura, el esfuerzo y las normas se quedaron en un segundo plano porque eso, para muchos políticos, tenía tufillo a ser de un pasado ideológico reciente. 

Sra. Calvo, usted sabe, igual que yo, que las "Manadas" se erradican y exterminan educando al personal. Lo que hacen falta son leyes y normas para mejorar la educación cívica, para saber convivir en sociedad y en libertad pero con respeto a los demás, con principios y valores, eso si que es necesario. Pero eso no vende y ustedes los políticos han sido incapaces de sentarse, de una vez por todas, a legislar unificando criterios educativos y poniendo los intereses de la sociedad por encima de los de sus partidos. Otra vez acaban de anunciar que vuelven a las andadas, otra vez quieren modificar la enseñanza, en concreto la LOMCE por su cuenta y sin consenso.....no escarmientan.

La mayoría de los jueces son mujeres, la mayoría de los educadores, son mujeres, la mayoría de periodistas son mujeres, la mayoría de los universitarios son mujeres. Lo tienen en bandeja para empezar ya y acabar con esta lacra en unos años, porque si no lo hacen, por más indeseables que metan en la cárcel y por más leyes, presupuestos  y medidas que se tomen contra el no consentimiento de la mujer ante el hombre no acabarán nunca con el problema. A los que tienen la mente cerrada por la ignorancia, el machismo y la falta de principios no les importan mucho las consecuencias de sus actos. Y a los datos de mujeres maltratadas y asesinadas me remito, incluso con alejamiento de sus asesinos. Déjense ya de demagogia y de figureo y vayan a la raíz del asunto. Los políticos se valoran por la eficacia de sus mandatos no por por oírse a si mismos.. No generen leyes de escaparate contra los hombres sino leyes a favor de la mujer que mejoren su protección y normalicen para siempre su igualdad en todos los terrenos .

Necesitamos una sociedad con leyes justas pero, sobre todo, con más formación en principios morales, cívicos y de comportamiento. Salga a la calle y verá como hay mucha gente incívica que no respeta nada porque no hemos sido capaces de enseñarles a convivir en sociedad y que, desde su ignorancia, creen que todo vale. Sólo tiene que ver las redes sociales, ese es el gran expositor de las carencias que tenemos. Está muy bien, y es necesario, y lo aplaudo que ministros y políticos participen en la visualización y reivindicación de determinados colectivos que han sido marginados durante tiempo como el LGTB o el feminismo militante, entre otros, pero también me gustaría verlos haciéndose la foto con los voluntarios de Cruz Roja, los bancos de alimentos, Caritas, ONGs, animadores de hospitales, acompañantes voluntarios de mayores y tantos otros que hacen cosas de verdad por los demás, ¿Porqué nunca salen ustedes en esa foto?. Esos no necesitan hacer desfiles, ni carrozas para aportar principios y servicio altruista a esta sociedad. Esos que lo que desnudan son su acciones humanitarias. Sin alardes, sin famosos que se suban a su carro, sin imponer nada. Esos que su única bandera de colores es el respeto por los seres más desfavorecidos. Esos que no son ni élite, ni lobby, ni un interesante nicho de mercado para el consumo. Esos que se manifiestan cada día en silencio y sin alarde desde la solidaridad, el ejemplo y el sacrificio. 

No estaría mal verla a usted, y otros miembros del Gobierno actual y de los venideros, llevando esa pancarta de los valores humanos, resaltando la labor de estos colectivos.  No de manera puntual por un barco de refugiados, de manera permanente. Ese sería un buen ejemplo para la sociedad y una forma de empezar a educar en valores y a construir tantas carencias. ¿Porque no visualizan también esa labor?. Lo mejor para el desarrollo de una sociedad moderna y un estado de derecho son buenas y justas leyes pero, sobre todo, resaltar y valorar a los protagonistas de los mejores ejemplos. Solo le pido, desde esta humilde artículo, que antes de tomar medidas legislativas, que parecen más producto de la improvisación de cara a la galería y al voto, reflexionen y se pongan a trabajar y a negociar con los demás partidos para elaborar leyes sensatas y razonables para crecer y para proteger de verdad y de manera eficaz a la mujer. Pero Sra. Ministra,....¡por favor! también para proteger, valorar y no arrollar a los hombres de bien que somos la mayoría.